viernes, 9 de febrero de 2018

CELL - STEPHEN KING (RESEÑA)

CELL

Cell es una novela de terror/apocalíptica de Stephen King del año 2006. En ella se cuenta la historia de Clayton Ridell, un escritor de cómics que se encuentra en Boston el día que el mundo se viene abajo. A través de un viaje macabro, Clay y un grupo de sobrevivientes deberán recorrer parte de Estados Unidos en busca de su familia. Una historia con elementos del género zombi mezclados con una idea original y espeluznante, en la que el autor nos adentra en un mundo inhóspito que se ha ido al garete gracias a los teléfonos celulares. 

En 2015 se estrenó la película dirigida por Tod Williams (Director de Actividad Paranormal 2) y protagonizada por John Cusack como Clay Riddell y Samuel L. Jackson como Tom McCourt.

¿DE QUÉ VA?

Clayton Riddell es un escritor de cómics que se encuentra en Boston firmando el contrato de su vida con su novela gráfica “El Caminante Oscuro”. Se encuentra feliz porque al fin tiene la posibilidad de sostener a su familia gracias a su arte. Pero mientras se dispone a comprar un helado para celebrar su nuevo contrato, algo extraño sucede: las personas se empiezan a comportar de manera agresiva; los coches comienzan a chocar; se escuchan gritos, disparos, explosiones; y un avión se estrella contra un edificio. Clay se percata que al parecer todo tiene relación con una misteriosa señal emitida por los teléfonos celulares, que está transformando a las personas en una especie de zombis (chiflados telefónicos). Dicha señal se conocerá como “El Pulso”. Y en pocos minutos todo se transforma en caos y destrucción. Es 1 de octubre y la sociedad ha comenzado a extinguirse.


En medio del desastre, un zombi con un cuchillo intenta atacar a un sujeto, pero Clay logra salvarlo. El hombre se presenta como Tom McCourt, un hombre menudo de mediana edad. Ambos se alejan de allí y se resguardan en el hotel donde Clay se aloja. Allí conocerán a dos sobrevivientes más; el gerente del hotel, el Sr. Ricardi, y una joven de 15 años llamada Alice Maxwell. Juntos llegan a la conclusión de que las personas se transforman en zombis por culpa de la radiación emitida por los celulares, y gracias a Dios ninguno de ellos llevaba uno encima en el momento de “El Pulso”. Al día siguiente, abandonan el hotel y se dirigen a la casa de Tom. Al llegar allí, se hacen con algunas armas para su protección, y se estremecen cuando perciben que los zombis comienzan a reunirse en grupos (rebaños) organizados, aunque solamente salen de día. Al final deciden acompañar a Clay hasta Kent Pond, Maine, para reunirse con su familia.


En su viaje llegan a la Academia Gaiten, y allí se encuentran con Charles Ardai, un anciano director de la Academia, y con un adolescente de 12 años llamado Jordan, su último alumno. El par les muestra que un rebaño de zombis se dirige cada noche al campo de fútbol de la Academia y se “apagan” hasta la mañana siguiente. También descubren que los zombis están empezando a desarrollar cierto tipo de habilidad telepática. Al final deciden destruir al rebaño de zombis, pero al poco tiempo todos empiezan a tener el mismo sueño: se ven en un estadio rodeados de zombis, mientras un desaliñado hombre que lleva una sudadera de la Universidad de Harvard se acerca. Al compartir su aterradora pesadilla deciden nombrar a ese misterioso personaje como "El Hombre Andrajoso". Cuando al fin se disponen a seguir con su rumbo, un rebaño de zombis rodea la residencia, y es allí cuando ven por primera vez al Hombre Andrajoso. Se empiezan a escuchar lamentos desgarradores a la distancia, y el grupo entiende que los zombis están asesinando a otras personas "normales". Al final, el Hombre Andrajoso ordena telepáticamente a los protagonistas que se dirijan hacia un lugar en Maine llamado Kashwak, que aparentemente está libre de redes móviles. ¿Pero por qué los zombis no los asesinan allí mismo si pueden hacerlo?

OPINIÓN

Stephen King ha tratado casi todos los tópicos del género de terror: vampiros, hombres lobo, asesinos en serie, niños malévolos, etcétera. Pero no había explorado a fondo el género zombi (en Pesadillas y Alucinaciones había escrito un relato sobre el tema, titulado “Parto en casa”) hasta esta novela, la cual tiene un toque distintivo del autor. Aquí no se presenta el típico virus que se propaga por medio de una mordida, sino que proviene directamente de un teléfono móvil. ¿Quién hoy en día no tiene uno? Es de ahí de donde parte la premisa sustancial de esta novela: el mezclar un tópico algo desgastado y entrelazarlo con algo tan actual y cotidiano que pueda resultar creíble.

La historia se presenta similar que otra novela de King titulada “Apocalipsis” (1990), pero con elementos menos fantasiosos y proféticos. Además, tiene una trama arriesgada por la cantidad de variables que nos ofrece a medida que se va desarrollando la historia, pero que personalmente creo no termina de hacer el autor. 


El hecho de señalar los clichés que se utilizan dentro del género zombi sería algo absurdo, ya que, con un género tan desgastado, estos saltan a la vista, y lo único que deben hacer los autores para conseguir una buena historia es saber utilizarlos a su favor. En este caso creo que King lo hizo.

Los personajes están bien desarrollados, algo que es común en King, pero debo decir que algunos pueden resultar insufribles en algunos pasajes de la historia, los cuales rayan con los acontecimientos que suceden en la historia. Es el caso de Alice y de Jordan, que con quince y doce años respectivamente, saben casi de todo y son quienes prácticamente resuelven el problema tan complejo que se presenta. Algo que podríamos aceptar dentro de la literatura fantástica, pero que definitivamente hay pasajes donde pueden resultar irritantes. Aunque también se debe decir que King los sabe llevar y los desarrolla de la manera correcta. Por otra parte, la cantidad de descripciones que presenta el autor a veces nos ayudan a percibir mejo el entorno, pero otras nos pueden resultar aburridas, sobre todo cuando nombra tantas calles y lugares concretos.

La historia se va presentando de una manera más o menos correcta hasta que, casi a la mitad del libro, Stephen King empieza a integrar cada vez más y más, elementos que se tienen que ir procesando poco a poco, haciendo que la trama se vuelva compleja. Nos presenta un programa virtual que se contagia por medio de un teléfono móvil, que produce algo en el cerebro de las personas y que puede mutar, el cual a su vez tiene un problema interno que lo estropea y genera una nueva forma de zombis. Nos habla de rebaños con memoria colectiva que se comunican mediante telepatía y hasta pueden levitar.

Todo lo anterior me hace pensar en una mezcla entre George Romero con sus muertos vivientes clásicos, y Richard Matheson, con sus nuevos zombis-vampiros (Soy Leyenda), los cuales se infectan por medio de un virus que también puede mutar. Es más, King dedica la novela a estos dos autores. Se podría decir que es una novela que mezcla los tópicos clásicos del zombi con la ciencia ficción moderna.

Respecto al final, para mí fue pobre y abierto, pues después de leer más de cuatrocientas páginas esperaba algo contundente y definitivo, o por lo menos una muestra real sobre lo que pasó con "El Pulso", pero una vez más Stephen King me dejó con las ganas. No es desastroso ni mucho menos, pero sí vago y abierto.

Sobre la película del 2015 dirigida por Tod Williams y protagonizada por John Cusack y Samuel L. Jackson (los mismos que protagonizaron 1408), no puedo decir mucho, pues no la he visto, pero he escuchado malas críticas al respecto.


Por último, cabe mencionarse que, a través de esta novela se señalan algunas referencias a la obra del autor, como por ejemplo el hospital psiquiátrico Juniper Hill que aparece en It (1986); el pueblo de Chamberlaine, Maine, donde se desarrolla Carrie (1974); los indios Micmac, que tanto se nombran en Cementerio de Animales (1983); Charlie el chuchú, que aparece en la saga de La Torre Oscura; o la referencia de “El Caminante Oscuro” que podría representar a Randall Flagg, quien aparece en La danza de la muerte (1978) y en la saga de La Torre Oscura, entre otros.

En la edición impresa se aclara que Stephen King no tiene teléfono móvil.

viernes, 2 de febrero de 2018

LA NIÑA DE LAS TINIEBLAS - LAIRD KOENIG (RESEÑA)

LA NIÑA DE LAS TINIEBLAS

The Little Girl Who Lives Down the Lane” es una novela de terror/suspenso de 1974 escrita por Laird Koenig. Fue un gran éxito en ventas en Estados Unidos y hasta la fecha es un libro recomendado para los amantes del suspenso en el que intervienen niños con la mente un poco retorcida. Aquí encontraremos a una niña de trece años que se comporta como una adulta autosuficiente, quien junto a su padre se acaban de mudar a Estados Unidos, procedentes de Inglaterra. Juntos alquilan una casa un poco alejada del pueblo y todo parece ir normal, hasta que el padre de la niña desaparece.

En 1976 se estrenó una película basada en este libro, dirigida por Nicolas Gessner y en la que Laird Koenig escribió el guion. Además, Jodie Foster interpreta a la protagonista de la historia.

¿DE QUÉ VA?

Rynn Jacobs de trece años y su padre, Leslie Jacobs, un poeta reconocido, se trasladan a un pequeño pueblo de la costa de Estados Unidos, procedentes de Inglaterra. Rynn es autosuficiente e independiente, pues así la crio su padre, por lo que es un poco apartada del mundo exterior. No va a la escuela por no aceptar a aquellos que "pretenden decirle cómo vivir". En definitiva, la pequeña no aparenta la edad que tiene.

Alquilan una casa a la encargada de la inmobiliaria del pueblo, la señora Hallet, la cual se encuentra ubicada a las afueras del pueblo, al final del sendero, pues a Rynn le agradó desde que la vio. Sin embargo, cuando Frank, el hermano de la señora Hallet, se presenta la Noche de Todos los Santos, día del cumpleaños numero trece de Rynn, las cosas toman un rumbo distinto. 

Mrs. Hallet es la típica vieja que se entera de todo lo que pasa en el pueblo y además, quien toma las decisiones importantes allí. Frank tiene un oscuro pasado, el cual Mrs. Hallet está intentando remediar, pero parece que la presencia de Rynn no ayuda mucho. 

Un día Mrs. Hallet visita a Rynn, pues quiere hablar con su padre y saber por qué ella no va a la escuela, aunque en realidad, quiere que se vayan de allí, pero Rynn le dice que su padre no se encuentra en casa. Mrs. Hallet le dice a la niña que va a bajar al sótano para coger algo que necesita, pero Rynn no se lo permite y le pide que se marche de la casa. Al final, Mrs. Hallet amenaza a la niña con denunciarla ante el consejo escolar por no ir a la escuela.

Al poco tiempo, Mrs. Hallet vuelve a la casa para entrar en el sótano, pero mientras se encuentra allí abajo ve algo que la deja atónita y la hace gritar. En ese momento Rynn cierra la puerta del sótano y la deja encerrada.

OPINIÓN

Es una historia interesante, con pocos personajes y escenarios, donde la acción se va desarrollando de a poco. Al empezar la novela, el autor nos trata de mostrar pequeños vestigios de lo que pasa en la vida de Rynn, lo cual hace que queramos avanzar más para conocer la verdad. Koenig nos induce al suspenso y juega con nuestra mente respecto a la lucha entre la inocencia y el mal.

Rynn es un gran personaje, que para la época de la novela pudo llegar a ser hasta poético, pero que en nuestro tiempo podría caer en lo incrédulo, ya que no aparenta tener trece años y su comportamiento raya con la realidad. Sin embargo, lo que pasa por su mente y las decisiones difíciles que debe tomar a través de la trama son inquietantes. Es enigmática, meticulosa, decidida, inteligente y con gustos peculiares.


La atmosfera que plantea Koenig es interesante, pues logra crear la tensión suficiente para que el lector ponga a funcionar su imaginación. La casa donde vive Rynn es opresiva y misteriosa, no sabemos lo que podría pasar allí, y lo más importante: es perfecta para la niña. Cada personaje parece ocultar algo y no sabemos lo que harán hasta que lo hacen. 

La novela es corta y ligera de leer, con bastantes diálogos y descripciones suficientes para que el lector se sienta atrapado. Quizás en algunos pasajes nos parezca que la historia es monótona, pero lo cierto es que el autor nos prepara para el desarrollo de la trama.

El trasfondo de la historia es algo que me pareció atrayente. Ya que Rynn conoce a un chico (Mario) que le ayuda a sobrellevar su difícil modo de vida, el cual hace que la niña tenga una lucha interior respecto a sus creencias y pensamientos. Quizás ambos son marginados de la vida, que demuestran esa lucha entre el bien y lo que se supone que es el mal para un niño. Desencadenando así una serie de terribles sucesos que se llevan a cabo con cada decisión que toman. Además, el autor también plantea el despertar sexual adolescente. 

Aunque debo decir que en ocasiones el personaje de Mario me pareció irritante, así como el tío de Mario, quien es el policía del pueblo, que, aunque es un personaje que transmite cosas, me pareció todo menos un policía.


En definitiva, es una gran relato de intriga que se va llevando poco a poco, y al final, cuando conocemos la historia de Rynn, entenderemos por qué hace lo que hace y por qué se comporta de esa manera. Quizás el final de la historia no es muy contundente, pero se mantiene en la propuesta que plantea Koenig, la cual hace que en general resulte acorde a la trama.